El Athletic Club sigue inexpugnable en San Mamés, donde no pierde desde la primera jornada liguera. El empate sin goles ante un FC Barcelona que llegaba en línea ascendente sirve para aumentar un punto más la ventaja europea, asentado como está en el quinto puesto. Después de un clásico con contadas ocasiones, el Real Betis se queda a ocho puntos y la Real Sociedad, a diez.
Los leones firmaron un magnífico partido defensivo, con tres cambios en la línea de atrás con respecto a la Copa. Prados e Imanol se mostraron firmes en lo defensivo. Los de Xavi Hernández sólo disfrutaron de una clara ocasión en el choque.
Fue una doble opción en el minuto 25, cuando Simón taponó un disparo de Fermín en el pico del área y Cancelo se inventó una vaselina tremenda desde medio campo, que fue sacada entre los guantes del guardameta y Yeray en la raya. El único sobresalto para el remozado equipo rojiblanco. Valverde, por pura lógica, refrescó el once en todas las líneas.
El choque fue equilibradísimo: los mismos disparos, los mismos córners… El Barça sufrió dos lesiones duras en el primer tramo, las de De Jong y Pedri. Había tenido toda la semana para preparar a conciencia el choque y lo cierto es que no paseó su superioridad en ningún momento.
Los arreones de Berenguer y Unai Gómez avisaban al Barça, que sólo inquietó con las entradas de Fermín y Lamine Yamal, que amenazaron sin llegar a incendiar el choque.
Los de Xavi Hernández llegaban con la misión de acercarse al liderato, pero el Athletic no se lo permitió. En toda la segunda mitad, sólo un cruce vital de Paredes sobresaltó a la grada. Y el partido acabó en un córner a favor, con remate de Dani García.
Hubo homenaje previo del Club y final de los futbolistas al socio fallecido tras ser atendido el jueves en la semifinal copera, Miguel Ocio. Un gran gesto.
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