Ayer se jugó en el estadio de El Sadar en Pamplona, la primera semifinal de la copa del Rey de este año. El encuentro fue entre el Atlético Osasuna y el Athletic Club con el resultado de 1-0, a favor de los locales.
En un partido muy cerrado y con pocas ocasiones de gol, el inicio fue un tira y afloja de ambos equipos que apenas inquietaban las porterías. Salvo la primera ocasión por parte de los rojiblancos, que ayer llevaban la segunda equipación, de Muniain que estuvo a punto de batir a Herrera, pero este saco un pierna y el rechace lo engancho Iñaki Williams marcando un gol que sería anulado por fuera de juego.
Ya en la segunda parte y en el minuto 47’, tras un contragolpe Ez Abde, batió con un tiro raso y cruzado al poste izquierdo al meta Julen Aguirrezabala subiendo al marcador el 1-0 definitivo. A partir de aquí los rojillos de Osasuna se limitaron a defender el resultado y sin crear peligro alguno, salvo a balón parado con córner colgados a la olla y faltas también, pero una veces el portero visitante y otras la propia defensa desbarataban el peligro.
Este solitario gol será el que tenga que defender Osasuna el próximo 4 de abril en San Mamés. Ahora toca remontada ante nuestra afición que seguro se volcará en busca de una nueva final. Además este nuevo sistema beneficia a los leones, al no valer doble el gol en campo contrario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario